Comprender el apoyo al capital retroactivo: ARCI, ARCE y ARCM

10 de agosto de 2024
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En el ámbito de la podología, los conceptos de soportes retrocapitales son fundamentales para comprender las soluciones propuestas para diversas patologías del pie, particularmente las relacionadas con los metatarsianos. En este artículo, exploraremos los tres tipos de apoyo retrocapital: ARCI (apoyo retrocapital interno), ARCE (apoyo retrocapital externo) y ARCM (apoyo retrocapital medio). Cada tipo de apoyo tiene indicaciones específicas y comprenderlas es fundamental para una atención podológica óptima.

¿Qué es el apoyo al retrocapital?

Un soporte retrocapital es una zona de soporte ubicada detrás de las cabezas de los metatarsianos. Estos soportes se utilizan para redistribuir las fuerzas de presión en el antepié, evitando así el dolor y la deformación provocados por una sobrecarga excesiva en determinadas zonas. El objetivo es proteger las cabezas de los metatarsianos y corregir determinadas anomalías del antepié.

ARCI: apoyo interno al retrocapital

ARCI se centra en descargar las cabezas de los metatarsianos mediales (M1, M2, M3). Este soporte es especialmente útil cuando se intenta aliviar la presión en la parte interna del pie, sin corregir un pie en valgo.

Límites y relieves del ARCI:

  • Anterior: Sigue la línea retrocapital de M1, M2 y M3, formando una curva cóncava hacia adelante a nivel del cuello del primer metatarsiano.
  • Posterior: Cóncavo posteriormente, se une a la marca de Lisfranc interna, medialmente.
  • Lateral: Curva con convexidad lateral que une el límite anterolateral con el límite posterolateral.
  • Medial: Recto, este límite une el límite anteromedial con el límite posteromedial con un ligero saliente para adaptarse al zapato.

En términos de relieve, el ARCI tiene forma de "ala de avión", con una cumbre ubicada en la unión del 45º posterior del 15º anterior. Este tipo de soporte está diseñado para descargar las cabezas de los metatarsianos mediales y reducir la presión ejercida sobre esta zona.

ARCE: apoyo externo al retrocapital

El ARCE está destinado a descargar las cabezas de los metatarsianos laterales (M4, M5). Este soporte es especialmente eficaz para combatir la supinación excesiva del antepié, especialmente si el material utilizado es suficientemente rígido.

Límites y alivios del ARCE:

  • Anterior: Sigue la línea de los pasos M2, M3, M4 y M5.
  • Posterior: Confundido con la mitad lateral/externa de la interlínea de Lisfranc.
  • Lateral: Rectilíneo, se extiende ligeramente desde la primera planta, no pudiendo proyectarse hacia el interior de la misma.
  • Medial: Curva con ligera convexidad medial, une los límites anterior y posterior.

Para los relieves, el ARCE puede presentar dos posibilidades: una forma de "ala de avión" con un vértice situado en la unión del 45º posterior del 15º anterior, o una forma de meseta, roma en sus dos extremos.

ARCM: mediana de apoyo retrocapital

ARCM se centra en descargar las cabezas de los metatarsianos medios. Este soporte se utiliza para redistribuir las fuerzas en los collarines y las diáfisis correspondientes, reduciendo así la presión y evitando la flacidez del antepié.

Límites y relieves del ARCM:

  • Anterior: Forma una curva convexa hacia adelante, al nivel de M2, M3 y M4.
  • Posterior: Ubicado a la mitad de la distancia entre los puntos de referencia de Lisfranc medial y lateral.
  • Lateral: Línea curva lateral ligeramente convexa, que se extiende ligeramente hacia el cuarto espacio intermetatarsiano.
  • Medial: Línea curva convexa medialmente, que se extiende ligeramente hacia el primer espacio intermetatarsiano.

El ARCM también puede presentar dos tipos de relieve: una convexidad dorsal con ápice mediano o una meseta roma en sus extremos. Este tipo de soporte es crucial para estabilizar los metatarsianos y evitar que se junten.

Los soportes retrocapital ARCI, ARCE y ARCM juegan un papel fundamental en el manejo de las patologías del pie, particularmente aquellas que afectan a los metatarsianos. Al comprender sus indicaciones y características específicas, los podólogos pueden ofrecer soluciones personalizadas que satisfagan las necesidades particulares de cada paciente. Si tienes alguna duda o experiencia que compartir sobre el uso de estos soportes, no dudes en dejarla en comentarios. Su participación ayuda a enriquecer esta discusión y ayuda a otros profesionales y pacientes a comprender mejor estos conceptos esenciales.

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